PROYECTO IDEOLOGICO completo


PROYECTO IDEOLOGICO


La organización política “Confederación Nacional Democrática”, emerge como respuesta a la necesidad expresada por la nación venezolana de contar con estructuras político partidistas modernas, ágiles y abiertas al colectivo, donde se pueda canalizar las inquietudes y necesidades de la comunidad con la finalidad de dar respuestas adecuadas y soluciones puntuales a los problemas sociales. Es por ello que Confederación Nacional Democrática estima necesario hacer del conocimiento público la ideología del partido para alcanzar la mayor aceptación y participación de los ciudadanos a tan importante estructura.

VISION DE PAIS Y DEL ESTADO

(CENTRO-NACIONALISMO-DEMOCRATICO: corriente de Centro, de sentimiento Nacionalista y sentido Democrático)

Confederación Nacional Democrática no es un partido de tendencias extremas; por el contrario nos ubicamos en el centro, de lo que podríamos llamar el espectro de las corrientes ideológicas, para tomar los aspectos positivos de ambas tendencias que se alejan de él, y desarrollar un modelo de acción que sea capaz de lograr con mayor objetividad, alcance y menor riesgo el desarrollo y la convivencia nacional: de la derecha tomamos su enfoque productivo y rentable, y de la izquierda su enfoque socialista. Nuestro principal objetivo lo constituye el desarrollo de una sociedad fuerte, equitativa y justa, con instituciones solidas sujetas al control de la sociedad; todo ello a través del desarrollo de un modelo democrático que tome en consideración la naturaleza, composición y manera de ser de los venezolanos y produzca los cambios socioeconómicos que impulsan el desarrollo sostenido, donde los ciudadanos y el estado sean los principales soportes, estimulo y garantías de estos propósitos, y el arbitro de todo; un estado dinámico y eficiente; un estado tan fuerte como sea necesario y tan flexible como indique la prudencia; en fin, el verdadero Estado Democrático.

Nuestra organización parte del convencimiento que el nivel de democracia perfecta se alcanza a través del trabajo y la educación. Del trabajo porque de él depende el sustento y la seguridad familiar; y de la educación porque de ella depende el avance y el progreso de toda sociedad.


Un Estado moderno y progresista es aquel que impulsa y contempla todas las fuentes de trabajo que una nación requiere para su desarrollo y sustentación, ofrece garantías y seguridad a las fuentes de inversión, y da protección a la fuerza laboral; fomenta el desarrollo a través de la educación, formación, instrucción y capacitación; brinda fuerte estimulo para el avance científico y tecnológico; y alcanza cada vez más la perfección del sistema democrático tras el ejercicio de sus virtudes.

La modernización del Estado venezolano pasa por la revisión de su estructura como elemento sustantivo y primordial. Hoy es imperativo corregir los desvíos a que ha sido sometido el Estado Venezolano (comprendido desde su nacimiento como República y tradicionalmente democrático sobre todo desde buena parte del siglo XX), y subsanar de esta manera los vicios que ha traído la modificación de un sistema ampliamente probado y sustituido por otro cuya ampliación de los poderes públicos nos ha dejado una madeja de burocracia, ineficiencia y corrupción. No es la ampliación de los poderes públicos, a través de la creación de dos más, lo que hace al estado más eficiente; es la eficacia de los poderes públicos lo que logra que el estado sea efectivo. Volver al concepto clásico de la república, cuyo principio basado en solo tres poderes es necesario y saludable. Rescatar el valor del servicio público, la moral ciudadana y la honestidad, debe ser fundamento de acción republicana y democrática. Confederación Nacional Democrática lleva por principio estos sólidos fundamentos como norma de conducta y acción. Todo correligionario del Partido debe tener claro que la moral pública, la buena moral pública, es y debe ser practica de virtud ciudadana, fuente de nuestra acción y base de nuestros principios. Adecentar la acción pública con hombres de talla moral y sólidos principios debe ser nuestro objetivo a la hora de conducir los destinos de la nación; esto se logra con el ejercicio cotidiano de la honestidad, rectitud y buenas costumbres. El País necesita hombres probos y capaces.

Nuestro principio fundamental de acción debe ser la concepción de una sociedad autogestionaria, y de un estado que tome conciencia que el ciudadano y la familia son y debe ser lo primordial.




La familia venezolana por la que abogamos es para nuestro partido una de nuestras mayores preocupaciones, por ser ella causa y consecuencia de los grandes males que hoy afectan a la sociedad nacional. Atender con esmero y dedicación los problemas que la afectan en el orden socio-económico, psico-social y muy especialmente los que tienen que ver con la perdida, distorsión o desconocimiento de los valores éticos y morales que orientan, auto regulan e identifican el comportamiento de los venezolanos, no pueden estar al margen de ningún partido que aspire dirigir los destinos de nuestro país. Dentro de estos propósitos los medios de comunicación masivos formaran parte de nuestras estrategias de acción.

Ir tras la búsqueda del hombre educado y capaz a través de la formación e instrucción para lograr el concepto de hombre familia, hombre comunidad, hombre nación, hombre estado, solo se logra con acciones contundentes y sostenidas en el tiempo en materia de educación.

¡Eduquemos y haremos hombres libres; eduquemos y habrá justicia; eduquemos y habrá progreso; si educamos habrá sociedad y tendremos nación libre, democrática y justa!



DESARROLLO, VIVIENDA Y TRABAJO

El modelo político al que estamos llamado a construir debe ser eminentemente social y progresista; un modelo en que el estado se constituya en fuente de estimulo para el desarrollo propiciando la inversión privada como cooparticipe de la acción del estado y, al mismo tiempo, fomente y realice grandes inversiones en proyectos de carácter nacional,
desarrolle proyectos de carácter social que de seguridad a las familias y a los trabajadores. Se respete la propiedad privada como un derecho ciudadano y humano. Proteja la pequeña y mediana industria como fuente importante de plazas de trabajo; alcance la meta anhelada de pleno empleo bien remunerado con planes de seguridad social justos y adecuados. Desarrolle proyectos de expansión para la agro-industria, ganadería y pesquería, para grandes y pequeños productores, y estimule los pequeños inversionistas comprometiéndolos con el desarrollo nacional; en pocas palabras, estimule el aparato productor.

Establezca una moderna legislación que permita la realización de una justa, eficaz y productiva reforma agraria; facilite créditos agiles y garantizados a los productores del campo, brinde asistencia técnica con apoyo fitosanitario y veterinario, y desarrolle adecuadas políticas de comercialización que garanticen máxima capacidad de abastecimiento interno y colocación en el mercado internacional de los excedentes de producción a través de convenios e intercambios comerciales.

Debe ser acción fundamental proteger a los trabajadores del campo a través de una legislación que alcance también a los trabajadores de las costas y el mar. Acción que no dejaremos pendiente será eliminar de raíz la economía informal por ser inestable y llevar a estos trabajadores al sector formal donde gozaran de mayores ingresos y asistencia de programas sociales a través de su participación en los sistemas de seguridad.

Todas estas acciones serian nulas si el estado no acometiera grandes planes de desarrollo habitacional con la construcción de urbanizaciones con casas confortables y de varios modelos y tipos, con diferentes esquemas de financiamientos y pagaderos en varios años con protección para familiares a través de seguros de vida que libera la propiedad al fallecimiento del deudor hipotecario, garantizando así la propiedad para los herederos y la seguridad familiar.

Es de suma urgencia transformar las barriadas construidas en cerros y laderas en urbanizaciones consolidadas con construcción de casas y edificios, con amplias vialidades y servicios que faciliten la comunicación, el acceso y la convivencia, dando así una adecuada transformación al medio ambiente y físico de estos sectores. Los planes de seguridad social serán facilitados a todos los venezolanos sin excepción alguna; el único requisito necesario es la cotización al sistema de seguridad que el estado ofrezca y al que el trabajador solicite. El sistema Bancario nacional participara junto con el estado para la conformación y sostenimiento de estos proyectos a través del financiamiento en la construcción de las urbanizaciones y viviendas, y el rescate de la inversión por medio del financiamiento en la venta con intereses de largo plazo.

Para que esto sea posible es necesario llegar a la condición de obligatoriedad del trabajo y para ello, el estado debe poner todo su empeño y acción en lograrlo.
Ningún venezolano estará sin empleo pues el ocio es la madre de todos los vicios y los vicios deben ser y serán erradicados. Los venezolanos no queremos ser esclavos de un estado que nos condena a su servicio a través de dadivas, hoy misiones. El trabajo nos hace libres y dueños de nuestro destino, imposibles de ser manipulados y conducidos al terrenos donde el populismo y demagogia florecen haciendo estragos con las necesidades del pueblo. Necesario será crear una adecuada cultura del trabajo pues sin ella caeremos siempre en la mediocridad laboral.

SALUD

Para el sistema de atención medica el estado debe actualizar toda la red de asistencia nacional a los fines de adecuarla para ser entregada a un régimen de administración controlada por el sistema de seguridad asistencial nacional, el cual será costeada por el estado y en parte por la ciudadanía que cotizara a través de sistemas de recaudación de acuerdo a su capacidad y número de miembros de su familia que desee amparar.
De esta manera se garantiza una adecuada cobertura asistencial sin intermediación de terceros en el manejo de los recursos, los cuales serán entregados por regiones y por instituciones y sometidos a rigurosos controles en el manejo de los fondos. De igual manera se establecerá la entrega de los medicamentos, equipos o materiales que el enfermo requiera, los cuales quedan incluidos en el sistema de seguridad asistencial.

En cuanto al sistema de atención privada no debe desaparecer ni desaparecerá, por cuanto queda al libre albedrío de los ciudadanos que aunque deben cotizar al sistema de seguridad asistencial, podrán adquirir si así lo creen necesario pólizas de atención que les permitirán acudir a centro de atención o clínicas privadas; conservándose de esta manera un sistema alterno de atención que permite, por competencia, el avance científico y tecnológico en la atención medica.

EDUCACION

Programa primordial de la acción del estado lo constituye la educación la cual creemos debe ser exhaustivamente revisada y actualizada a las exigencias de hoy, comenzando desde la educación preescolar hasta la educación superior, pasando por los sistemas de educación especiales para discapacitados y los regímenes de educación para el adulto.
Todo esto conlleva una acción conjunta entre los sectores público y privado, aprovechando la vasta experiencia y conocimiento existente en esta materia, pues es de mutuo interés por tratarse de un aspecto compartido.

Debemos educar y formar ciudadanos primero, para instruirlos y capacitarlos después; para ello existen experiencias pasadas y con muy buenos resultados, lamentablemente descuidados y desechados. Estamos conscientes que la educación debe ser controlada por el estado, pero ello no debe ser para mediatizarla o condicionarla a criterios subalternos alejados del interés nacional sino para conducirla de acuerdo a criterios modernos concertada con los sectores involucrados. El principio fundamental que nos anima es educar para ser ciudadanos útiles, justos, provechosos y competitivos. Una acción que debe ser emprendida por el estado, desde el gobierno nacional y los gobiernos regionales y locales, es la reeducación para una sana y adecuada conducta ciudadana.


SEGURIDAD Y CUERPOS POLICIALES

Elemento resaltante por la urgencia, necesidad y utilidad, debe ser lo concerniente a los cuerpos policiales garantes de la seguridad ciudadana. Nuestro sistema policial que ha venido experimentando cambios propiciados por la descentralización, ha sufrido al mismo tiempo los defectos que el mismo proceso conlleva por ser este una experiencia a la que los venezolanos no atábamos acostumbrados y que, al poner en práctica un sistema federal, lo convertimos en sistema feudal propiciado por los liderazgos regionales que no entendieron, mas aun hoy, que el federalismo es un sistema que para ser perfecto es necesario primero estar fuertemente impuestos de su fragilidad antes que de su utilidad; ahora bien, si estamos conscientes que este sistema es el más apropiado para alcanzar el desarrollo sostenido y equilibrado de las regiones, entonces es necesario aceptar que existen estructuras que respetando el sistema federal atan a las regiones como un todo conservándose el concepto de integración nacional. Si comprendemos y aceptamos esta premisa básicamente valida como principio, entonces estaremos en el camino de establecer estructuras institucionales que resguarden adecuadamente la seguridad ciudadana sin menoscabar el principio federal. Hoy día padecemos una fuerte ola de violencia e inseguridad que desborda a las instituciones policiales sin resultados de reducción o exterminio del hampa y sus consecuencias. Las causas son muchas y de variada naturaleza.
El estado debe garantizar bajo una acción técnicamente elaborada y concertadamente ejecutada la seguridad del ciudadano, creando sistemas que permita el desarrollo de instituciones policiales sólidas con amplia seguridades para sus integrantes, capacitación permanente, control estricto en el cumplimiento legal de sus funciones, y que sea la comunidad por intermedio de sus instituciones las que supervisen y controlen su funcionamiento.


POTENCIALIDADES PARA EL DESARROLLO

Estos proyectos de vital importancia solo podrán llevarse a cabo bajo una acción efectiva y sostenida del estado que impulse el desarrollo económico a niveles que pueda soportar el gasto de inversión que se requiere para atender y dar solución a tan urgentes problemas.


El Estado Venezolano cuenta con el potencial de riquezas que la nación posee, principalmente las que provienen de los yacimientos petroleros, ferro mineras, aluminio, carboníferas, auríferas, diamantíferas, yacimientos de minerales para la construcción, fuentes hídricas para la energía eléctrica,
potencial para generación de energía no contaminante, grandes extensiones de tierras cultivables, gran cantidad de mar territorial para la industria
Pesquera, inmenso recurso geográfico para la industria turística, posición geográfica y geopolítica envidiable que hace de nuestro territorio un emporio con posibilidades de rápido crecimiento y desarrollo que solo espera de acciones para dar los resultados por tiempo anhelado.

Dar los pasos para generar los recursos que de ellos se deriven es tarea fundamental de nuestra organización. Crear las condiciones necesarias para abrirse al mercado con incentivos adecuados para la inversión privada nacional y extranjera, con una legislación moderna y justa, y garantías sólidas a la inversión, son aspectos de vital importancia que nuestro partido está comprometido a llevar a feliz término pues en ello va implícito la creación de grandes fuentes de trabajo tan necesarios para la seguridad de nuestros conciudadanos. Dotar al país con grandes y modernas vías de comunicación, desarrollar un sistema moderno de trenes que interconecten toda la geografía nacional es de urgencia que no espera postergación.


ASPECTO ECONOMICO


Confederación Nacional Democrático orienta su propuesta económica dentro de un concepto de desarrollo sostenido, democrático y descentralizado, donde cada región, a través de comisiones estadales de planificación y coordinación u otras estructuras decida, en base a sus necesidades, recursos disponibles y especificaciones geográficas, los proyectos que desde el gobierno se deberán ejecutar en las área económicas, infraestructura, social, etc., los cuales en su conjunto constituirán la parte sustantiva del Plan Nacional de Desarrollo, al que deben estar referidos todos los programas del gobierno estadal y nacional.

Así mismo, la sociedad y los ciudadanos individualmente, a través de instancias creadas para ello, harán el seguimiento y control de la gestión de los Gobernantes, cuyas observaciones y recomendaciones tendrán carácter vinculante en las decisiones que habrán de tomar las correspondientes legislaturas. El incumplimiento de las líneas de programación del Plan Nacional de Desarrollo, será suficiente causa para que la Legislatura correspondiente solicite la destitución del funcionario de cualquier nivel del Poder ejecutivo.

La actividad económica se orientará bajo los principios de la productividad y rentabilidad, con una distribución equitativa de los beneficios, en base al aporte en trabajo en el proceso productivo de los trabajadores, sin descuidar las debida previsiones financieras que aseguren el avance científico y tecnológico, necesarios para mantener la reproducción ampliada de los procesos productivos en escala cada vez mayor dentro de los principios de una economía autogestionaria, donde los ciudadanos, de manera individual o asociada, siguiendo las líneas del Plan Nacional de Desarrollo, promuevan y estimulen modelos productivos de gestión y diferentes formas societarias y estructuras de acumulación de riquezas de carácter privaos u otras formas de propiedad distintas a las privadas; integrador y no excluyente; participativo y equitativo; sustentado en la mayor libertad e igualdad posible entre los participantes, con sus propios recursos, con ayuda del estado o por otros medios lícitos.




ECOLOGIA Y PETROLEO

El país en su carrera por alcanzar el desarrollo no debe ni puede dejar de tomar acciones para la conservación del ambiente y sus recursos; acción fuerte con legislaciones apropiadas son de obligatoria ejecución sin demoras ni concesiones para su cumplimiento. Preservar el ambiente y la fauna, tomar las medidas para evitar el daño ecológico nos garantiza mejor calidad de vida con la seguridad de contar con ellos por generaciones. Insertar al país en la lucha contra el calentamiento global y la conservación del medio ambiente nos impone un cambio importante sobre todo por ser país petrolero; hasta allí tenemos que llegar: cambiar los patrones de refinación por patrones cero contaminantes y esto nos obliga a explorar nuevas técnicas de refinación, así como desarrollar nuevas y mejores técnicas en otras industrias que contaminan el ambiente.

La industria petrolera nacional tendrá que hacer grandes esfuerzos tecnológicos para producir un combustible de baja contaminación para la industria automotriz lo cual redundara en grandes beneficios para la nación.
Así como la industria petrolera hará cambios en beneficio del ambiente, otro tanto se impondrá al parque industrial nacional pues en ello estamos todos comprometidos.

Se debe establecer una certificación ambiental a todas las industrias o empresas del sector productivo nacional, de la que derivará beneficios o sanciones según el caso; con lo que se busca respetar el medio ambiente como asiento fundamental del desarrollo sostenido, evitando los elementos abrasivos y contaminantes, y apoyando las actividades que resguarden y prolonguen el periodo de vida útil de nuestro entorno inmediato y en consecuencia del planeta al proteger la capa de ozono, la biodiversidad de las especies, la protección de los hábitats y conservación de ríos y cuencas.


INVERSION PRODUCTIVA DEL PETROLEO

Creer en la inversión productiva del petróleo es mirar de cara al futuro con optimismo y voluntad; es tener la convicción de alcanzar la superación de los problemas por la acción racional y sostenida de toda una nación con el conocimiento claro del porqué y para qué invertir su principal recurso en areas como la educación, vivienda y salud.
La siembra del petróleo tendrá sentido y resultado si se realiza en la formación del ciudadano pues por la acción de la educación se alcanza el desarrollo. De allí qué, a este recurso, tendrá que dársele un destino que no se pierda por el camino del despilfarro y corrupción, que llegue a todos los venezolanos por igual y que garantice la estabilidad social al dar seguridad a las familias. La industria petrolera nacional tendrá que reacomodarse nuevamente a los niveles de máxima exigencia en capacidad técnica, profesional y gerencial; máxima producción en productos refinados y manufacturados y mínima exportación de crudos extraído. Dejar de exportar la materia prima y exportar productos manufacturados debe duplicar los dividendos con el beneficio de crear mayores fuentes de empleos.

Para que todos estos contenidos de la vida nacional tengan adecuada respuesta será necesario un cambio en la manera de pensar y en la manera de hacer. Debatirnos entre principios o esquemas contrapuestos y discutir si aceptamos modelos probadamente ruinosos carece hoy de verdadero sentido y muestra acertadamente una ausencia de ingenio y audacia en el empeño. Negarnos al diseño de programas de contenido y justicia social afianzándonos en las fuentes del capital por creerlo imposible; negarnos a aceptar la fuerza laboral como capital de las empresas y por ende interesada en el crecimiento y desarrollo de las fuentes del capital; pensar que siempre son irreconciliables el capital y la fuerza del trabajo, y desechar la posibilidad de que la sociedad a través del estado pueda ser el fiel de la balanza y equilibrio entre el capital y los trabajadores, no tiene cabida en nuestro pensamiento. Debemos abrir caminos y hacia allá apunta nuestra voluntad.


REORGANIZACION DEL ESTADO

El estado venezolano debemos rediseñarlo para que sea efectivo y no efectista, para que sea fuerte más no abusivo, para que sea pequeño y no débil; finalmente, para que la sociedad se aproveche de sus bondades colocándolo a su servicio y no el estado subyugando a la sociedad bajo su peso.
Imaginemos al estado venezolano como la herramienta que la sociedad tiene y utiliza para alcanzar todos los beneficios que le sean posibles sin que este sea un organismo que, por su estructura y diseño, se torne cuasi
autónomo, pesado y omnipotente, y por ende, difícil de controlar por la sociedad.
Si tomamos la estructura clásica de la república con sus tres poderes (Legislativo, Judicial, y Ejecutivo) y colocamos en el vértice de la pirámide al poder legislativo seguido por el judicial y luego al ejecutivo, en ese orden de importancia, veremos cómo cambia el sentido de las cosas en lo concerniente a la función y configuración del estado, y en la preponderancia que la sociedad alcanza cuando, por medio de su representación, puede organizar, supervisar, controlar y cambiar si fuere necesario los restantes poderes cuando estos no se correspondan con las funciones que le encomienda la constitución y las leyes de la república. Debemos considerar al legislativo como la esencia y fuente del verdadero poder que, sustentado en el poder judicial garante de la ley y del derecho, debe servir de contención frente a los desvíos del ejecutivo, así como dar el debido apoyo y reconocimiento al gobierno cuando este en sus funciones garantiza la estabilidad, el progreso y la paz social.

Sin embargo; frente a esta realidad que planteamos debemos estar conscientes de resguardar al ejecutivo de los excesos en que pueda incurrir el legislativo, más, cuando la correlación de fuerzas no favorezca al primero y lo que está en discusión es de vital significación para el país. Es nuestra intención dar, en su medida justa y dimensión adecuada, el valor que cada poder público debe tener en su relación con la sociedad; es por ello que al colocar en el vértice de la pirámide de los poderes públicos al legislativo le damos una relevancia por ser el órgano de máxima representación de la nación seguido del poder judicial pues este ata y encadena a todos al influjo de la ley y el derecho; y finalmente, el poder ejecutivo pues es el organismo que realiza en obras y acción lo que la nación le encomienda.

Restituir el congreso con sus cámaras de senado y diputado es procedente y necesario a los fines de conformar una estructura legislativa ágil y plural cada una con atribuciones y competencias definidas, y estructura organizativa propias a su nivel.

Conformar el poder judicial con jueces de competencia y probidad corresponderá a la sociedad a través de la escogencia por el voto popular, previa calificación y certificación de credenciales ante una comisión especial constituida por una representación social de la jurisdicción correspondiente y del poder legislativo, para garantizar así la selección sin
intereses contravenidos con la finalidad que se persigue como es la correcta administración de justicia.
De igual manera se procederá con la selección de los jueces que conformaran los tribunales superiores regionales y la corte suprema de justicia. Solo así se podrá contar con Corte suprema, tribunales superiores y tribunales de instancias de absoluta independencia.


FUERSAS ARMADAS

De suma urgencia será revisar y reestructurar las fuerzas armadas de manera de llevarlas a niveles de despartidización en que deben estar para cumplir con su principal objetivo como es ser garante del orden interno, la integridad de sus fronteras y seguridad de la nación. Volver a hacer de ellas una institución al servicio de la nación y supeditarlas al poder civil, vale decir al Congreso de la república en primera instancia, y al Poder Ejecutivo en segundo orden, es condición indispensable para la sana convivencia nacional y de gran significación para el avance democrático.

En ningún caso los ascensos en la escala de oficial o suboficial entraran a ser competencia de otro poder que no sea el legislativo, previa evaluación de una comisión del congreso en conjunto con el órgano regular o comisión de ascensos de las fuerzas armadas. Será potestad y competencia del ejecutivo nacional hacer la selección y nombramiento de oficiales para ocupar cargos administrativos dentro de las fuerzas armadas así como la escogencia del jefe de la casa militar.

Actualizar y adecuar todo el aparato militar a la necesidad del país no debe ser ni será postergada, así como tampoco el mejoramiento técnico y capacitación profesional. Se debe reducir el contingente militar con la finalidad de maximizar los recursos destinados para esta institución y, al mismo tiempo, aumentar los años de servicio para aprovechar aun más la experiencia de su recurso humano.

Todo lo que concierne a las condiciones sociales de sus integrantes y familiares debe ser actualizado y adecuado a las necesidades de hoy. Modernizar las Fuerzas Armadas implica también realizar un cambio radical de los pensum de formación y educación en las academias; adecuarlas a conceptos modernos donde la asimilación de los principios democráticos, estructura del estado, funcionamiento y razón de ser de los poderes públicos, subordinación al poder civil y sumisión a la constitución, sean la base fundamental de su formación.

En esta etapa temprana de la formación militar debe hacerse énfasis en el valor colectivo por encima de lo individual; eliminar por siempre el estigma y fantasía del caudillismo, figura perniciosa por sus consecuencias, y enseñar nuestra historia militar con sentido crítico; diferenciando el heroísmo y glorias del pasado, como elementos y valores importantes a tomar en consideración en la construcción del sentimiento del honor, desprendimiento y rectitud.

La sumisión de las fuerzas armadas al Poder civil, debe entenderse como respeto incondicional a la Carta Magna y obediencia irrestricta al Congreso Nacional y al Poder Ejecutivo en ese orden.

La sola suposición de que un estado debe contemplar en su estructura un aparato armado y tenerlo porque sí para garantizarse el monopolio de la violencia sin consideración a otros elementos primordiales no parece acertado, antes bien, debe ser contemplado el porqué y para que, el costo operativo, su efectividad e impacto en la sociedad, y, finalmente, su dimensión como condición indispensable para su conformación. Es por ello que Confederación Nacional Democrática se compromete a revisar a fondo todos estos temas de la vida militar de la nación con la finalidad de reformar las fuerzas armadas para hacerlas más razonable a las exigencias de hoy.
Analizar la condición de Comandante en jefe de las Fuerzas Armadas que recae en el Presidente de la república, su eficacia y fundamento, será tema de imperiosa necesidad a los fines de adecuarlo y mejorarlo a las exigencias de un estado moderno y enteramente democrático.


UNIVERSIDADES Y ESCUELAS TECNICAS

Las Universidades e institutos superiores gozarán de autonomía pues de ello depende la formación pluralista, la competencia académica y el sentido crítico que toda institución de estudios superior debe tener.

Se estimulará la investigación procurando que ellas mismas sean fuentes de ingresos para nuevos avances científicos y tecnológicos de sus laboratorios o talleres. Debe ser revisado el presupuesto de las universidades públicas a objeto de adecuarlos a sus exigencias.

Se facilitaran convenios internacionales con otras universidades para complementar la formación académica de postgrados, y se ampliará las condiciones y las areas de formación en los planes de becas del programa Ayacucho, de preferencia el nivel de postgrado. Igual tratamiento tendrán los institutos de formación técnica y los egresados de estas instituciones. Sobre este particular, se pondrá especial esfuerzo e interés en crear y desarrollar nuevamente las escuelas técnicas industriales de tan importantes resultados en tiempos pasados.

LA FUNCION Y MORAL PÚBLICA

En otro orden de idea; es obligatorio para el estado venezolano contar con funcionarios públicos que conozcan la misión y naturaleza de su función con sentido de responsabilidad y competencia, así como tener claro que: todo funcionario o autoridad pública lo es para servir y no para ejercer autoridad a su antojo y con la ventaja que le da la majestad del cargo. Para ello, proponemos y nos comprometemos a crear las escuelas de formación del funcionario público, haciendo énfasis en el trato hacia los usuarios de los servicios, la moral del funcionario y la honestidad administrativa. Dar la debida atención y fuerza legal que estos trabajadores requieren para ejercer su función, como el cuidado que el estado debe dedicar a todo lo que representa la seguridad individual y social de estos trabajadores. La formación del funcionario público reviste gran importancia y prioridad porque de ello depende la imagen y eficacia del estado. Un empleado del estado debe estar debidamente formado y remunerado, legalmente asistido y ser moralmente solido y de honestidad comprobada. De esta manera estaremos atacando de manera puntual una de las principales fuentes de corrupción existente en la nación venezolana; pues, desapareciendo la figura del sobornable, por principios morales o por fuerza de la ley, desaparecerá el que aspira a sobornarlo. Y para este último: ¡todo el peso de la ley!

Los venezolanos no podremos tener nunca un sistema republicano, democrático y descentralizado, que sea serio y respetable, si continuamos permitiendo, y más aun cohonestando con nuestra pasividad, la ofensiva y degradante corrupción observable en cualquier nivel de la administración pública con ramas y nexos profundos en todos los estratos sociales y corporaciones.


Erradicar esta perversa práctica con métodos y condiciones sostenibles y ejemplarizantes tiene que ser asumida nacionalmente a través de una campaña moralizante consustanciada con una fuerte acción punitiva llevada a la práctica por la sociedad y sus instituciones.

Es una premisa del derecho que la pena se corresponda con el delito cometido, pero, que sean severas muy severas, cuando el delito sea contra la cosa pública, debe ser un sobre añadido por demás saludable a la conservación de la moral del estado y sus instituciones.
Nunca seremos respetables ni respetados como sociedad ni como nación si caminamos con la moral comprometida; en consecuencia, tendremos el desprecio por respuesta y la vergüenza y la ruina por resultado.

LIBERTAD DE EXPRESION

Un elemento fundamental a tomar en cuenta a la hora de la campaña adecentadora de la moral pública, lo constituirá la libertad de expresión y de prensa; las cuales, aceptadas, aplicadas y practicadas con sentido ético y de responsabilidad, deben dar los resultados esperados dentro de la convivencia democrática y civilizada a la que estamos llamados a construir.

Que nunca más se atente contra estos principios o derechos fundamentales; y que jamás el periodismo se separe o se desprenda de la ética, la responsabilidad y la veracidad que debe tener como fuente de su legitimidad.
Una prensa libre y responsable como también el derecho a la información que debe tener todo ciudadano es fundamental para garantizar el estado de derecho y la pervivencia del sistema democrático.

LA IGLESIA VENEZOLANA

Venezuela desde su fundación ha sido consecuente en su fe religiosa identificada con el catolicismo y ratificada desde comienzos de la república por los diputados del primer congreso nacional. La participación activa en el proceso de independencia por parte del clero venezolano así como en todos los procesos importantes de la nación, y la mayoritaria concurrencia y participación de los venezolanos en los principios y doctrina de la iglesia católica, nos compromete afectiva y moralmente a proteger la iglesia venezolana como un valor inestimable del pueblo.



Mantener los principios religiosos en una sociedad es propiciar desde temprana edad elementos de sana convivencia basados en preceptos básicos de respeto, moralidad y buenas costumbres.

En nuestro país, católico por excelencia y tradición, conservar estos principios conduce a una sana conducta colectiva con incalculables beneficios a la sociedad.

Se debe respetar y mantener el principio de libertad de culto como principio fundamental de los derechos del hombre; más sin embargo, considerando la devoción del pueblo venezolano por la fe católica, el estado pondrá especial atención a la iglesia católica venezolana, sin descuido de las demás, para el mantenimiento y divulgación de su doctrina a través de mecanismos que permita una mejor y mayor fluidez en estos aspectos.


CULTURA

La transculturización a que hemos llegado los venezolanos no escapa a la dinámica de la globalización; dinámica que condiciona una fuerte influencia en el comportamiento de la sociedad produciendo cambios que en muchos aspectos son beneficiosos pero, no ejercer sutil y prudente control sobre ello permitiendo que se privilegie lo foráneo en detrimento de lo autóctono es un descuido imperdonable que conlleva una pérdida de referencia de la identidad nacional, perjudicial a todas luces.


Es por ello que el estado, a través de organismos como educación, cultura y turismo, ejercerá el fomento y control de todo lo concerniente a la investigación, aprendizaje y divulgación de nuestra cultura en todas sus variedades y manifestaciones, para lograr masificarla nuevamente en nuestra población y contrarrestar los efectos perjudiciales de la adopción, por costumbre, de culturas de otras latitudes.








CUESTION INTERNACIONAL

De interés preponderante será nuestra acción y participación en el contexto internacional y regional la cual estará determinada por la promoción y defensa de los valores y principios democráticos, el respeto de los acuerdos y tratados que Venezuela haya contraído, siempre y cuando no lesionen el interés nacional, alteren la paz en la región o atenten contra los principios democráticos que sostenemos, y al entendimiento, intercambio y participación justa y equitativa de los acuerdos comerciales que sean estratégicamente importantes para la nación. De gran significación para nosotros será la conservación y celosa defensa de la integridad territorial con apego a la estricta demarcación de nuestros límites territoriales que siempre hemos poseído; la revisión de los laudos arbitrales que nos han despojado buena parte del territorio nacional; y finalmente, mantener el firme a los principios propósito de la no intervención excepto para la paz, el respeto democráticos y la defensa de los derechos humanos.

Propiciar la integración americana es de vital objetivo para nuestra política exterior la cual creemos pasa primero por la democratización de los países de la región, para luego avanzar hacia la unión continental a través de la confederación de las naciones sostenida sobre los principios de respeto y cooperación mutua.
Los alcances y beneficios de esta integración solo se obtendrán si logramos superar nuestros complejos y prejuicios, y corregimos nuestras diferencias y vicios que nos hacen pocos confiables a la hora de consolidar una unión duradera y estable.

Hoy los venezolanos luchamos por rescatar el sistema democrático seriamente comprometido en nuestro país. La realidad de hoy nos impone a ser más creativos, a madurar en el pensamiento democrático y a entender y aceptar que las diferencias se superan en libertad y se toleran en democracia.
Estamos seguros que de esta circunstancia saldremos victoriosos y, una vez alcanzada la libertad y rescatada la democracia, nuestro ofrecimiento y compromiso con propiciar los valores y principios democráticos en el contexto latinoamericano será el mejor aporte y ejemplo de la constante superación de las adversidades a los que los venezolanos estamos acostumbrados.

COMPROMISO

Confederación Nacional Democrática debe su nombre al principio de la descentralización contenida en el texto constitucional, y al espíritu ciudadano que desea dirigir el destino de sus regiones sin menoscabo o detrimento a la unidad nacional. Así como el Estado debe ser y será descentralizado unido solo por la voluntad de la nación en federación, así mismo nuestro partido, respetando los liderazgos regionales, debe ser confederado, unido por el principio ideológico y doctrinario que compartimos y por el deseo de tener una nación en paz y progreso donde se respete el estado de derecho, la división de los poderes, y se garantice el ejercicio pleno de las libertades cívicas y los derechos del hombre.





“POR LA SUPERACIÓN SOCIAL Y EL DESARROLLO DEMOCRATICO”





Felipe Russa Hernán Acosta Nayib Ayaach